La Escuela la Siembra se traslada a este terreno de 1 ha. La primera instalación es el kínder, por el ofrecimiento de este galpón agrícola abandonado, como instalación provisoria. Para ello desarrollamos un proyecto muy económico a partir de ventanas donadas, paneles de madera terciada y lonas tensadas para encielar, se requiere de mínima inversión y máximo espacio que pueda actuar como interior-exterior.

La segunda etapa es este proyecto cuyo centro y corazón es el espacio vacío entre los volúmenes de administración y las salas octogonales, allí se construirá en la tercera etapa el espacio cultural para exhibición de actos artísticos.

Las  8 salas octogonales se organizan generando patios estrellas por cada 2, cada uno con una materialidad distinta (maicillo, pasto, agua, piedras, etc) Se unen entre ellas por un corredor techado que va acompañado de paramentos translucidos de ladrillos que servirán de guías para el crecimiento de enredaderas, cuyo rol es también proteger de las caras mas asoleadas. La materialidad de estas salas será de quincha metálica, (aprovechando que la región tiene amplia oferta de armado de galpones metálicos), y va a ser rellenada y estucada con tierra y paja, para que las y los niñes puedan terminar, a lo largo de los años, estas paredes con su arte manual.

El master Plan considera una cancha asociada al bosque añoso existente, que va a funcionar como el primer patio, resguardando un espacio mientras dure la obra.

El acceso a la escuela va a ir acompañado por canales de regadío, y una huerta que va a poner en evidencia las distintas estaciones del año, expresadas en sus frutos y flores.